Creatividad y discapacidad

Despertando la creatividad

En las últimas semanas hemos tenido que realizar un trabajo de investigación par

a preparar una propuesta que presentamos a una convocatoria relacionada con la creatividad y la discapacidad.

Fruto de toda esa investigación, es este artículo, con el que pretendemos volver a poner en evidencia la importancia no, la necesidad de la creatividad y la imaginación en los procesos de desarrollo personal, emocional, social y profesional en al entorno de todas las personas, incluidas aquellas que viven con alguna discapacidad.

¿Qué es la creatividad?

Antes de nada, aclaremos que existen muchos tabúes a la hora de hablar sobre creatividad. La gente tiene a unir esta palabra con genios de la música, del arte, del diseño. Pero se olvidan de que la creatividad y la imaginación han sido el motor que ha hecho avanzar el mundo desde que el hombre es hombre. La invención de la rueda, el fuego, la agricultura… todo es resultado de un conflicto al que se le ha debido buscar una solución; es decir generar ideas para resolver situaciones frustrantes.

La creatividad no siempre está relacionada con cosas grandiosas o duraderas, también está muy relacionada con la cotidianidad. Por ejemplo, mi marido preparando el menú de la semana. Eso sí que es ser creativo.

El proceso creativo tiene tres pasos principales

  1. Identificación de un problema
  2. Persistencia en los errores
  3. Concepción de ideas originales y apropiadas

Según los psicólogos Baghetto y Kaufman (2009) existen cuatro tipos de creatividades.

  • Creatividad momentánea (mi pequeño Carlos jugando con una piedra a naves espaciales)
  • Creatividad cotidiana (Pilar, mi hija adolescente organizándose los deberes)
  • Creatividad profesional (yo investigando y escribiendo para este proyecto)
  • Creatividad eminente (La que produce cambios a niveles sociales, el inventor de Google por ejemplo. Claramente de este tipo no hay nadie en mi familia a tenor del saldo de mi cuenta corriente a fin de mes)

De manera que rechazar nuestro talento creativo, es como si rechazáramos lo que más caracteriza al ser humano. Su capacidad de transformación.

Desarrollo de habilidades transferibles.

La creatividad es imprescindible para desarrollar las llamadas habilidades transferibles. Este tipo de habilidades, son cada vez más utilizadas en los programas universitarios, y demandas en los puestos de trabajo. Hacen referencia a todas aquellas habilidades que, sin tener relación directa en el desempeño profesional, sí completan a la persona desde el punto de vista experiencial. Suelen ser habilidades muy transversales y son fruto de las diferentes destrezas que la persona ha ido adquiriendo a lo largo de su trayectoria vital. Algunas de ellas serían:

  • Destrezas que despiertan el ánimo creador
  • La actitud abierta a lo desconocido
  • La capacidad de resolución de problemas
  • La asunción de riesgos
  • La ilusión ante nuevos retos
  • La curios
    idad como herramienta de crecimiento
  • Desarrollo del pensamiento re
  • ceptivo

La inclusión plena de la discapacidad.

Por nuestra experiencia en proyectos relacionados con la discapacidad como los Cuentos que contagian ilusión, proyecto que realizamos junto a la Fundación ONCE, sabemos que la persona con discapacidad conoce y reconoce su problemática mejor que nadie.

Poner el foco de atención en lo que ya conocen, no contribuye a su inclusión. Al contrario, se cierra el círculo entorno suyo. Por ello, cuando nos disponemos a enfrentarnos a trabaj0s relacionados con la inclusión de la discapacidad ponemos el foco en que, durante el proceso creativo, sean ellos el motor del cambio. Este enfoque crea vínculos sólidos en su manera de relacionarse con el mundo exterior, pues se ven como parte de la solución. Se trata de enseñarles a trabajar desde un lugar de apertura y conexión con el entorno, para generar cambios positivos en su autopercepción.

Cuando creamos nos hacemos más inteligentes según la neurociencia, pues se activan hormonas como la oxitocina o la betaendorfina. De manera que una persona creativa es:

  • más feliz
  • más ilusionada
  • más pro-activa
  • más entusiasta
  • más abierta
  • más capaz

“Yo soy el que soy, no el que creo que soy o el que me han hecho creer que soy”

Esta es la atmósfera que se debe crear en entornos de inclusión y discapacidad, para que de forma autónoma, ellos mismos encontrar la forma de habitar el talento recibido.

Nota: Las fotos han sido realizadas por el Equipo de Con Causa en los ensayos de la obra teatral "En la ardiente oscuridad" de Buero Vallejo